Al momento de solicitar un préstamo personal, se espera y planea que este se podrá pagar mes con mes sin problema alguno y puntualmente. Sin embargo, pueden surgir situaciones inesperadas que dificulten el pago puntual de nuestra deuda con la entidad bancaria. Esto nos puede traer problemas a futuro y hacer crecer nuestra deuda.
¿Qué pasa si no puede pagar una deuda de préstamo personal?
Al dejar de pagar la cantidad acordada mensualmente, comenzará a recibir llamadas y/o avisos por parte del banco en donde solicitó el préstamo y en este caso lo mejor es tratar de encontrar una solución. Evitar las llamadas y vivir con miedo de responder el teléfono no es la solución ideal, ya que al no cumplir con sus pagos, comenzarán a incrementarse los intereses poco a poco, haciendo así que la deuda inicial se vaya convirtiendo en una deuda más y más grande.
Al solicitar un préstamo personal, la garantía que damos al banco son propiedades personales y si no estamos cumpliendo con pagos por largos periodos de tiempo, corremos el riesgo de que nuestras pertenencias sean embargadas. Incluso podemos llegar a perder nuestra casa, automóvil o parte de nuestro salario.
Es por esto y por proteger nuestro historial crediticio que es importante que al darnos cuenta de que no se puede continuar pagando la deuda de forma puntual, se busque llegar a un acuerdo directamente con la entidad financiera. De esta forma, nos aseguramos de obtener la mejor opción de acuerdo con nuestra situación económica.
El banco nos puede ofrecer distintas opciones como un refinanciamiento de la deuda, alargar un poco el plazo de liquidación de la deuda para que de esta forma los pagos mensuales se vuelvan cantidades más pequeñas, entre otras.
Es importante recordar que, al momento de tener complicaciones por imprevistos o situaciones inesperadas como accidentes, situaciones de salud, pérdida de empleo, etc., siempre habrá una solución para el pago de sus deudas y la mejor opción es buscar ayuda.
